miércoles, 15 de julio de 2009

La primera cima.


Y ya es hora, después de la resaca vaquillera, de comentar el concierto del día seis, ¿no creéis? Antes de nada, he querido comenzar el blog con una foto del momento en el que os agradecimos el estar ahí; ¡Gracias!
¿Sensaciones? Sinceramente no me veo capaz de expresarlas aquí. La llegada al recinto por la mañana para realizar las pruebas de sonido, ya nos iban aventurando que ese no iba a ser un concierto cualquiera. Sentirte un reputado grupo por un momento, con unos fenómenos de técnicos, amabilidad por parte de la organización (que no por parte de la seguridad, pero eso no viene al caso) y no tener que descargar ni cargar ni un simple pie de micro. A pesar de que el tiempo que nos concedieron fue más bien limitado, y recortado todavía más momentos antes de empezar a tocar; la experiencia, creo que va a ser inolvidable para todos nosotros.

Llega la hora, y nos toca empezar el show a nosotros. ¿Nervios? Los de siempre, ni uno más. Algo nos dice que todo va a salir genial. El sol golpea con fuerza, pero eso no va a ser impedimento para que lo demos todo. Un par de canciones y parece que llevemos cientos. Como siempre, vosotr@s ahí, parece una tontería, pero no podéis imaginar hasta que punto reconforta veros cuando dirigimos nuestra mirada abajo. No nos cansaremos de daros las gracias.

Termina el concierto, y aunque con ganas de que hubiese sido más largo, satisfechos con lo acontecido sobre ese escenario en mayúsculas. Algo que nunca habríamos esperado: terminamos el concierto y diversos medios de comunicación se interesan en preguntarnos qué tal la actuación, entre otras cosas.

Estamos en un momento maravilloso y esperamos que ni el trabajo, los estudios o la vida de cada uno en general, hagan que esto se detenga. Que sea al contrario, que cada día tengamos más ganas (como sucede ahora mismo) y que pronto podamos regalaros algún tema propio.

Nos veremos en lo que queda de verano y ……… ¡¡¡Bourbonearemos!!!